El Ministerio de Empleo y Seguridad Social, ha dado orden al inicio de estos trabajos que permitirán en breve incluir a los policías locales en esta normativa. Esta media afectará a un colectivo de más de 70.000 trabajadores del citado colectivo. Procedimiento para incluir a los Policías Locales: la normativa permite el anticipo de la edad mínima exigida para jubilarse solo a colectivos que desarrollen actividades cuyos trabajos sean de naturaleza excepcionalmente penosa, tóxica, peligrosa o insalubre y acusen elevados índices de mortalidad, a través del establecimiento de coeficientes correctores. Para ello, el ‘RD 1698/2011, establece el procedimiento general para establecer coeficientes reductores y anticipar, la edad de jubilación en el sistema de Seguridad Social’ señala la elaboración de estudios. Así, la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social analizará el establecimiento de dichos coeficientes, mientras el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo y por la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, sobre siniestralidad de la tarea de los agentes locales.

Situación en Catalunya: aunque algunos ayuntamientos catalanes se han negado a colaborar en este proyecto no facilitando información necesaria, desde la Agrupación de Policía de CCOO han agradecido el trabajo a la mayoría de corporaciones locales, que si han colaborado en el proyecto de la Secretaría de Estado de la Seguridad Social y de la Federación Española de Municipios. La Plataforma de Policías Locales y Autonómicos, formada por CCOO y las principales fuerzas sindicales, representan a más del 95 % de los efectivos policiales a nivel estatal.

Desde hace años se está luchando para conseguir esta reivindicación histórica por una cuestión de dignidad profesional, que otros cuerpos policiales ya tienen reconocida. Los policías tienen una media de edad muy alta, por lo que desde hace años ya se viene solicitado al Gobierno que regule un adelanto en la edad de paso a segunda actividad o la situación de retiro de los agentes. Aún así, son muchos los policías que se ven obligados a seguir patrullando las calles, ante la falta de puestos de segunda actividad.